Denunciaban el caos organizativo de la compañía y las presiones para vulnerar "los límites de actividad, violación del régimen de días libres y vacaciones, de los convenios colectivos y de la legislación vigente"
El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) en Spanair denunció hoy en un comunicado hecho público antes del accidente, "continuas presiones y amenazas por parte de la Dirección para que los tripulantes y el personal de mantenimiento transgredan las normas, incluyendo vulneración de límites de actividad, violación del régimen de días libres y vacaciones, de los convenios colectivos y de la legislación vigente".
El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) en Spanair advirtió de que convocarían una huelga legal ante la Autoridad Laboral en caso de que la dirección de la compañía continuase pretendiendo "imponer" el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) "al margen de lo que recogen los convenios colectivos de sus trabajadores, evidenciando con todo ello su falta de voluntad real de diálogo".
Sepla-Spanair criticó la "indefinición" del denominado Plan de Viabilidad propuesto por la dirección de Spanair, dado que, a su juicio, "no garantiza el futuro de la empresa y supone una prolongación del modelo gestor aplicado con tan malos resultados durante los últimos años".
Asimismo, el sindicato de pilotos consideró "inviable" el "caos organizativo" en el que vive la compañía e insistió en que, de proseguir la "nula disposición" del actual equipo directivo para mitigar las "gravísimas carencias organizativas y estructurales" de la compañía, adoptará los pasos necesarios para solicitar ante la Autoridad Laboral la convocatoria de una huelga legal.
Por otro lado, estimó que el Plan de Viabilidad incluido dentro del ERE (presentado el pasado 8 de agosto y que contempla la extinción de 1.062 empleos) es únicamente un "plan de ahorro inmediato de costes, en el que para nada se trata el futuro de la compañía".
El Sepla señaló que los mismos gestores "responsables de haber llevado a la empresa a su precaria situación" han contratado los servicios de una consultora con el único propósito de justificar los "nulos resultados de su modelo empresarial".
De este modo, consideró que la dirección de Spanair "pretende eludir sus responsabilidades en un intento de convencer, tanto a los trabajadores como al resto de la opinión pública, de que los motivos esgrimidos en la elaboración del ERE son totalmente ajenos a la propia gestión de la Dirección".
Por otro lado, criticaron que los "problemas endémicos de dimensionamiento de la plantilla están provocando continuas presiones y amenazas por parte de la Dirección para que los tripulantes y el personal de mantenimiento transgredan las normas, incluyendo vulneración de límites de actividad, violación del régimen de días libres y vacaciones, de los convenios colectivos y de la legislación vigente".
"Desde el primer momento, el colectivo de pilotos de Spanair ha hecho alarde de su responsabilidad como profesionales, tratando de evitar el deterioro de la calidad del servicio en medio del actual caos y mostrando su disposición a afrontar las medidas necesarias para llevar a cabo el proceso de reestructuración, por duras que éstas resulten", subrayó el Sepla-Spanair.
Transcurrido más de un mes desde que se anunciaran las pretendidas medidas de extinción de puestos de trabajo, "sólo se ha celebrado una reunión de cuatro horas", lo que, en opinión de Sepla-Spanair, pone de manifiesto la "falta de voluntad real de diálogo" por parte de la dirección de la compañía.
La mesa de negociación que está analizando los pormenores del plan de viabilidad que Spanair prevé llevar a cabo iba a reunirse en la tarde de hoy, lo que no ha sucedido a causa del trágico accidente.
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