¿Convertirá Berlusconi a los rumanos en los "nuevos judíos"?

Los poblados que no son desmantelados son quemados por los italianos

La ofensiva que el nuevo gobierno de Berlusconi ha dirigido contra los inmigrantes afincados en Italia puede estar sirviendo de justificación a muchos ciudadanos para tomarse la justicia por su mano. Al menos así se desprende de los ataques producidos a las afueras de Nápoles, donde al menos cinco campamentos de inmigrantes han sido reducidos a cenizas tras el intento de una joven rumana de secuestrar un bebé. Los primeros anuncios y medidas de Berlusconi amenazan peligrosamente a los inmigrantes, especialmente al colectivo rumano. ¿Los llegará a convertir en los "nuevos judíos" que tanto sufrieron en el pasado siglo?
La campaña electoral llevada a cabo por Berlusconi y sus aliados extremistas de la Liga Norte, cargada de proclamas xenófobas y racistas, comienza a tener sus consecuencias. El Ejecutivo ha mostrado ya su decisión de llevar a cabo sus promesas y espera poder aprobar a lo largo de esta semana un decreto que convierta la inmigración ilegal en un delito y, con ello, la expulsión de aquellos extranjeros que no demuestren tener cierto nivel de renta y una vivienda considerada habitable. Y, por supuesto, ninguna de las dos exigencias es cumplida por los poblados de ciudadanos rumanos y de etnia gitana que malviven a las afueras de las ciudades italianas.